Tónico de Caléndula de Kiehl's

Llevo unos meses obsesionada con las aguas florales y los tónicos, así que he aprovechado el otoño para investigar. Además de gustarme mucho la sensación que dejan sobre la piel, se están convirtiendo en un imprescindible, ya que me conceden una tregua entre esos minutos que pasan desde que limpio el rostro hasta que lo hidrato. Como os he contado alguna vez, no me gusta pasar de inmediato a la hidratación una vez he terminado con la limpieza, y el tónico me permite tomarme el último paso de la rutina facial con más calma.

El último tónico que he comprado es un poco más caro de lo que pensaba gastar en un cosmético que aunque me encanta, técnicamente no es tan tan tan necesario como un limpiador o una crema: se trata del famoso tónico de caléndula de Kiehls, uno de los productos más vendidos de la firma, y el favorito de los maquilladores de los desfiles. Me ha sorprendido leer que es un best-seller, ya que no es precisamente económico: cuesta 38 euros. Pero vale cada euro que cuesta.

 

 

Lo que me convenció del tónico de caléndula fue precisamente eso, leer que era el tónico favorito de los maquilladores, por su acción calmante, humectante, hidratante, y sobre todo, por no tener una gota de alcohol en su composición. No soy demasiado maniática con los ingredientes de los cosméticos, pero es cierto que prefiero evitar los tónicos con alcohol. De hecho, los tónicos de Clinique, los más vendidos del mercado, dejaron de gustarme por la cantidad de alcohol que tenían en la composición. Los cosméticos con alcohol resultan muy atractivos para las mujeres de piel grasa, pero deshidratadan el cutis a largo plazo.

Y la causa de que casi todas las pieles grasas también estén deshidratadas es el alcohol, presente en la formulación de los productos astringentes. Por ese motivo, un tónico que cumple con su función sin necesidad de llevar alcohol es algo a tener en cuenta.

 

 

La caléndula es una de las flores más valoradas en la industria cosmética por sus propiedades cicatrizantes y calmantes, especialmente a la hora de tratar irritaciones dérmicas. Por esa razón, un tónico de caléndula es un must para pieles sensibles. ¿Es mi caso? No realmente, pero como os he dicho muchas veces, nunca hay que ceñirse estrictamente a nuestro tipo de piel a la hora de comprar cosméticos. Y tenía muchas ganas de tener un producto con caléndula en la composición.

El tónico de caléndula de Kiehl’s lleva flores de caléndula dentro del bote, un detalle que puede parecer una tontería, pero me encanta. Me hace sentir que la efectividad del tónico no se acaba nunca, que las propiedades de la caléndula están presentes hasta el final. ¿No os da la sensación de que los últimos usos de un cosmético son menos eficaces? Creo que no va a ser el caso.

 

 

 

Otro ingrediente presente en el tónico de caléndula y que me interesaba mucho era la alantoína. Se trata de una sustancia química que fomenta la regeneración de la piel, además de estimularla para que genere nuevas células en sustitución de las células deterioradas o envejecidas. Es decir, acelera ese proceso natural, y favorece la regeneración de los tejidos. Esos conceptos son muy atractivos para mí, ya que estoy en pleno proceso de renovación de la piel gracias al microneedling.

Lo estoy utilizando dos veces al día, empapando bien un disco de algodón y pasándolo por la piel totalmente limpia. No tiene mucho misterio. Parece que va a ser muy duradero, intuyo que los 250 ml me van a dar para unos cuantos meses.