En 2004, todo México se quedó totalmente fascinado con la protagonista de la telenovela Rubí. La actriz era Bárbara Mori, una guapísima uruguaya de 26 años.
Rubí batió todos los records de audiencia del país. Era la primera vez que la audencia empatizaba con una protagonista que no era buena, sino mala, muy, muy mala. Parte del mérito se debía a los encantos de Bábara: era bellísima y actuaba bien. Tenía carisma y supo darle a Rubí su toque personal de ironía, fuerza y pasión.
¿Cuál es la historia de la actriz que interpretó a Rubí?
Bárbara Mori Ochoa nació en Montevideo en 1978. Es hija de madre uruguaya y padre descendiente de japoneses. A los 12 años, su familia se trasladó a México. Después de trabajar como camarera, consiguió su primer papel en 1997 en TV Azteca. Era bonita, pero tenía sus defectos. Como cualquier mujer normal.
A los diecinueve años, Bárbara Mori se enamoró del también actor Sergio Mayer y tuvo un hijo con él. Se llevaban doce años y, debido a la gran diferencia de edad, Sergio Mayer asumió un papel mezcla de novio y padre protector. Según él, la uruguaya era una chica que estaba completamente sola en el mundo: necesitaba a alguien que le indicara por dónde ir y qué hacer para conseguir sus objetivos.
Fue él quién la animó a que estudiara inglés y también le pagó un tratamiento blanqueador y corrector para arreglar sus dientes «porque se veían raros». Luego se separaron pero continuaron siendo amigos.
En 2003, Televisa empezó las gestiones para rodar una súper producción basada en la novela de Yolanda Vargas Duche, Rubí. Narraba la historia de una chica pobre pero muy hermosa que le robaba el novio a su mejor amiga para salir de la pobreza.
Esa era la primera novedad de Rubí. La protagonista iba a ser todo un bicho, ambiciosa, cruel y capaz de cualquier maldad con tal de salirse con la suya.
El casting estuvo abierto durante meses. Lo primero que quedó claro fue que Rubí iba a ser morena y de ojos verdes. A partir de ahí, empezaron a buscar. Las audiciones de actrices famosas fueron un completo desastre. Todas tenían un físico demasiado producido; es decir, artificial. No podían interpretar a una universitaria. Otras tenían problemas de cutis que iban a requerir montones de maquillaje de base, algo imposible, ya que parte del rodaje se iba a hacer en Cancún, un lugar con mucha humedad.
El casting fue tan difícil que, dos meses antes de empezar a rodar y con medio reparto ya contratado, todavía no se sabía quién iba a interpretar a Rubí. Para facilitar las cosas, decidieron subir la edad de Rubí, de los 18 años previstos en un principio, hasta los 22. Era lógico. Ninguna actriz puede ser bellísima, sexy, seductora, perversa, capaz de despertar los más bajos instintos en los hombres, y al mismo tiempo aparentar ser una adolescente.
El 26 de febrero de 2004 Bárbara Mori, una desconocida para el público, viajó hasta las instalaciones de Televisa en México DF para una prueba de cámara. Solo necesitó un par de audiciones y una entrevista personal para conseguir el papel por el que todas las actrices mexicanas se morían.
Según la prensa, Bárbara Mori se había hecho un retoque en la nariz, una operación de aumento de pecho y a una abdominoplastia para darle firmeza al vientre. Su cuerpo era una obra de arte, delgado pero con curvas maravillosas.
Bárbara Mori era bellísima, pero no tenía una piel perfecta. La piel del contorno de ojos la tenía muy seca y eso hacía que se le notaran mucho las arrugas de expresión. El acné era otro tema que traía a la producción de cabeza. Era muy frecuente que Bárbara tuviera algún grano en la frente. Como el rodaje no se podía parar y los granos protuberantes no pueden disimularse con maquillaje, así que no podían hacer más que dejarlos ahí y esperar que la gente no se fijara.
Cuando Rubí se casa, la novela cambia de escenario y se traslada a Cancún, tal y como estaba planeado. El cambio en la vida del personaje exigía un nuevo look. La idea inicial fue que Bárbara Mori luciera una melena muy larga y totalmente lisa, pero vieron que por culpa de la humedad caribeña, el pelo de la actriz no aguantaba ni cinco minutos sin encresparse. Entonces, los peluqueros cambiaron de opinión y optaron por hacerle ondas con gomina. Un tipo de peinado más sencillo de hacer y de retocar en las pausas del rodaje.
En la tercera y última parte de la novela, ha pasado un tiempo y Rubí ya tiene unos veintiséis años. Para mostrar a Rubí con una imagen más sofisticada y hacer que pareciera algo más mayor, le pusieron más maquillaje, usando mucho perfilador negro y sombra de ojos.
Aunque la belleza de Bárbara Mori era impresionante, era necesario que el resto de las actrices no la eclipsaran. Eso provocó que actrices muy despampanantes en la vida real parecieran muy poca cosa en la serie. Es lo que ocurre con la hermana «fea» de Rubí, Paty Diaz, y con Maribel, su mejor amiga/mayor enemiga, que fue interpretada por una ex Miss México, Jacqueline Bracamontes.
Las únicas actrices que pudieron mostrar su físico explosivo fueron las que interpretaron a las mujeres que realmente hacían que a Rubí se le complicaran las cosas con sus hombres, como Marlene Favela y Yadhira Carrillo.
En los últimos capítulos, cuando la maldad de Rubí alcanza picos realmente peligrosos, los rizos de Rubí se asemejan a los de una muñeca diabólica y viste de rojo y negro en todas sus escenas. Esos cambios eran avisos que se usaban para mostrar al espectador que el alma de Rubí ya no tenía salvación.
Aunque esos rizos eran una exageración, parece que gustaron al público. Después de la telenovela, Bárbara Mori consiguió un súper contrato con L’Orèal para promocionar un champú para cabellos rizados, cabellos chinos en México.
Aquella no fue la única gran oferta que la actriz recibió después de la telenovela. Rubí fue un boom en toda Latinoamérica y la popularidad de Bárbara Mori se disparó. Televisa le ofreció un cheque en blanco para que interpretara a Rubí en una segunda parte e incluso productores de Hollywood le hicieron propuestas muy tentadoras. Conocida mundialmente como la Megan Fox latina, Bárbara Mori tenía las puertas abiertas para convertirse en una estrella, pero no quiso. Su intención era ser consideraba una actriz de método seria y para conseguirlo, tenía que alejarse de trabajos comerciales, aunque le dieran más dinero y fama.
Al final, esa decisión no fue acertada: la carrera de Bárbara Mori nunca fue por donde ella quiso. La mayoría de las películas que ha rodado después de Rubí han sido un fracaso. Jacqueline Bracamontes, en cambio, sí que aprovechó la oportunidad que le dio la telenovela y hoy en día es una de las mujeres más famosas de México.
¿Qué aspecto tiene Bárbara Mori ahora, catorce años después de Rubí? La verdad es que el paso del tiempo le ha sentado un poco mal. Sigue siendo bellísima, pero ha envejecido un poco deprisa. Era normal pensar que una cara tan perfecta como la suya iba a aguantar un poco más. A ella tampoco le interesa mucho la belleza, aunque mejorara la suya en sus comienzos como actriz. No es nada presumida y le gusta un estilo de vida hippie y natural, sin artificios.
La última noticia sobre Bárbara Mori es increíble. Su hijo Sergio ha seguido sus pasos y se ha convertido en padre a los dieciocho años. Como Bárbara le tuvo a esa edad, eso quiere decir que la actriz se ha convertido en abuela… ¡a los treinta y ocho años! Wow.
¿Qué opináis de Bárbara Mori? ¿Os acordáis de Rubí?
Totalmente de acuerdo contigo, nunca voy a entender porque tomó esta decisión, tenía toda la oportunidad del mundo de salir allí, ganar millones y seguor trabajando porque trabajos no le faltarian.
Una pena no volver a verla en ninguna telenovela.
Igual es porque es una persona que le preocupa más proyectos que le llenen… Ha estrenado pelicula nueva,tiene productora, y ha hecho una serie para tv llamada 2 lunas con bastante éxito… Ella lo que quiere( creo yo) es ser reconocida por buena actriz… Es muy bella pero creo que ella no le ha dado munca mucha importancia.
Imajino que se le subio los humos pero yo queria ver rubi 2 ..
Creo que ahora está a punto de divorciarse :(. Eso dice la prensa en el país.
Aparte cambió muchísimo últimamente se ha puesto muy flaca y trae un rubio platinado descuidado, ese look no le queda nada bien, además que sumando todos sus tatuajes en las piernas tan delgaditas que tiene ahora la hacen parecer como si estuviera enferma 🙁
Mirad lo que pone en la segunda portada, que ha dejado lácteos, harinas y azúcares y está genial!