Ondas Playeras, ¿Cómo Conseguirlas?

En verano, conseguir unas buenas ondas playeras es uno de los grandes objetivos de belleza. ¿Cómo se hace ese peinado?

Siempre quise ser una de esas chicas que después de un día de playa terminaban de forma natural con esas preciosas ondas tipo mujer surfista, beach waves. Es un tipo de peinado muy codiciado porque dentro de su sencillez, -y de ese aire descuidado-, es una preciosidad. Lo malo es que para conseguirlo hay que partir de una buena base. El pelo tiene que ser manejable, fácil, de esos que apenas da disgustos. Tiene que ser liso pero no lacio, no tener problemas de encrespamiento, sequedad extrema o tendencia a sufrir enredos…

En definitiva, tiene que ser un pelo normal. ¿Y quién tiene un pelo normal?

Las ondas playeras no pasan de moda y gustan a todo el mundo, por eso cada vez hay más tutoriales y vídeos donde explican cómo hacerlas en casa. El problema es que, en mi opinión, esos vídeos hacen que se haya perdido un poco el concepto de lo que son las beach waves. Coger un moldeador y hacer rizos de medios a puntas no es un tutorial para conseguir unas ondas playeras: es un tutorial para hacer un peinado para salir de noche o para ir a una boda.

Así pues, para conseguir unas buenas ondas playeras hay que buscar esa naturalidad. Eso se consigue con el uso de la sal marina. Si os gusta preparar vuestros propios cosméticos caseros, hay una manera de fabricar un spray propio. Se consigue, dicen, mezclando dos vasos de agua caliente, una cucharada de sal, una cucharada de aceite de coco y un poco de gel fijador.

Hay decenas de DIY en Pinterest: algunas chicas sustituyen el gel por la miel orgánica, y en lugar de utilizar la mezcla resultante como spray, la aplican en el cabello a modo de mascarilla. La miel y sal no se van tan fácilmente, así que los restos que permanecen en el cabello consiguen ese efecto.

Muchos resultado que he visto son un poco bruja Lola, así que quizá sea mejor ceñirse a lo más parecido al agua de mar que podemos encontrar en la cosmética. Los sprays moldeadores de sales marinas son la mejor opción para conseguir unas ondas playeras sin esfuerzo. Se vaporizan sobre el cabello húmedo o seco a unos 30 centímetros de distancia. El más popular, quizá por ser el primero, es el spray de Bumble & Bumble, hecho a base de magnesio, extracto de algas y sal. 

Yo no puedo utilizar estos sprays por el alisado de keratina, aunque me las arreglo con moños y trenzas que me hacen unas ondas bonitas al soltarlos. Pero creo que si no fuera el caso, me dejaría tentar por el spray de sal de Rahua, Enchanted Island Salt Spray. Wow, qué cosa más apetitosa y qué rabia me da no poderlo usar, aunque quizá lo compre para usar en las últimas semanas antes del retoque, cuando ya cambia poco que use un producto capilar con sal.

Este spray para conseguir ondas surferas está inspirado en la luna de miel que los fundadores de Rahua pasaron en las Islas Galápagos. Busca que sus afortunadas clientas logren un precioso cabello de sirena en menos de dos minutos. Para distinguirlo del resto de productos de este estilo del montón, el de Rahua lleva sal rosa del Himalaya, azúcar de guayaba y extracto de hibiscus.

Actualizo: mi amiga lo está usando y dice que no reseca nada. Puede que si la formulación tenga los suficientes ingredientes hidratantes no pase nada, pero a no ser que tengáis un cabello extremadamente agradecido a lo Gisele Bündchen, no es una buena aplicar los sprays de playa una y otra vez el mismo día. Suelen ser de un solo uso, dos como mucho para retocar. No olvidéis que llevan sal. Si los usáis en exceso, podéis terminar con el pelo muy seco y con un volumen descuidado que no queda bonito. Os acordaréis de todos vuestros antepasados cuando os toque lavarlo.

No olvidéis comprar una buena mascarilla capilar para contrarrestar la acción de la sal, y a disfrutar de vuestro peinado de diosa.