Grandes Lecciones que He Aprendido Este Año

Grandes Lecciones que He Aprendido Este Año

Cuando se acaba el año, toca hacer balance y repasar las grandes lecciones que hemos aprendido durante los últimos doce meses.

Creo que 2015 ha sido un grano año. He aprendido muchísimo y he descubierto cosas que han cambiado mi vida radicalmente. He conseguido acabar con el acné, conseguir el cuerpo de mis sueños y tener la piel bonita por primera vez en mi vida. Estoy contenta de haberlo aprendido todo yo sola, a base de experimentar e informarme por internet.

Estas son las grandes lecciones de 2015.

-La limpieza es lo más importante:

Cada vez que pienso en esos años de dinero tirado a la basura por culpa de sérums, cremas y demás potingues… OMG. Ha sido este año cuando he descubierto que la limpieza es el paso más importante para tener una piel en condiciones. Sin una limpieza profunda, todo lo demás no sirve para nada.

Eso no significa que la solución sea frotar la cara con el gel de farmacia más agresivo que haya en el mercado. Parte importante de este descubrimiento han sido los limpiadores suaves, a base de aceites, tipo bálsamo. Me han cambiado por completo la piel. Son increíbles porque limpian el cutis al mismo tiempo que lo dejan hidratado.

-Los aceites faciales son los grandes aliados de la piel grasa:

Tantos años huyendo de cualquier cosmético que tuviese algo que ver con los aceites. Ahora resulta que los amo. No uso otra cosa.

Un aceite facial adecuado y de buena calidad os dejará la piel mejor que cualquier sérum o crema que haya en el mercado. Los aceites faciales son cosméticos maravillosos. Pueden hidratar el cutis a la vez que controlan y regulan el exceso de sebo. Eso es lo que ocurre con el aceite de jojoba, un producto que debería ser obligatorio para cualquier mujer de piel grasa.

-Los suplementos de belleza pueden conseguir una piel perfecta:

A principios de año me quedé ATÓNITA cuando me di cuenta de que mis granitos desaparecían gracias a unas cápsulas de omega 3. Teniendo en cuenta que yo había completado cinco tratamientos de isotretitoína sin resultado, supe que tenía ante mí un mundo nuevo. Que merecía la pena explorar.

Aparte del aceite de pescado, he descubierto que el gran cóctel de la belleza son las cápsulas de biotina y zinc para el cabello, el colágeno marino para la elasticidad de la piel y los probióticos para mejorar el tránsito intestinal. Creedme, no hay nada mejor para la belleza que encontrar los suplementos adecuados.

-El alisado con keratina funciona:

Cuando pienso que el alisado de keratina lleva años en las peluquerías y yo acabo de hacérmelo me dan ganas de morirme.

El alisado de keratina es lo mejor para el cabello seco y encrespado.No existe nada en el mercado igual de efectivo y sin consecuencias negativas para el pelo, a diferencia de otros alisados más agresivos. Siempre pensé que mi pelo era tan rizado que ni siquiera la keratina iba a servir para nada. Y me equivocaba.

-El deporte es imprescindible:

Otra de las cosas a las que me resistía era a pisar el gimnasio. Ahora no puedo vivir sin hacer deporte. Es increíble lo que puede hacer por nuestro cuerpo. En mi caso, lo que me ha convertido en una adicta son las actividades dirigidas en grupo. Es la mejor manera de perder peso, tonificar y moldear el cuerpo sin aburrirnos.

-El maquillaje, poco y de buena calidad:

No soporto los arsenales enormes con trescientas sombras y cien bases. Nunca he querido tener uno. Si es hobby, una pasión o se trata de una Make Up Artist, lo comprendo. Pero no es el caso de lo que suelo ver.

No sirve de nada tener quince sombras de mala calidad y de colores mediocres cuando puedes tener una sola sombra, maravillosa, que va a durar siglos y no se va a mover de su sitio. No quiero empezar un debate caro VS barato. Solo se trata de entender que a no ser que seamos una mujer camaleónica como Linda Evangelista es imposible que veinte colores distintos nos favorezcan.

-Dormir bien es lo más importante:

Parece ridículo, pero desde que descubrí la melatonina soy otra persona. Dormir bien es imprescindible para tener buen aspecto. Os pondría fotos mías de antes para que vierais como tenía la cara y los ojos, pero me da vergüenza. No hay nada más horroroso que tener cara de cansada permanentemente. Por no hablar de otras consecuencias como las ojeras o los párpados hinchados.

¿Y vosotras? ¿Cuáles han sido las grandes lecciones de este año?