Los Problemas de Peso de Miss Estados Unidos

Los Problemas de Peso de Miss Estados Unidos

Alyssa Campanella es una chica de Nueva Jersey que en 2011 se convirtió en Miss USA. Eso le dio derecho a representar a su país en Miss Universo. Las estadounidenses que participan en el concurso no son nada del otro mundo, ya que como sucede en países llenos de mujeres bellísimas como Brasil o Argentina, las chicas guapas prefieren tomar otros caminos.

Alyssa Campanella parecía una excepción: era sencillamente espectacular. Quedaba claro que iba a destacar en la competición.

 

 

Estados Unidos llevaba desde 1997 sin ganar la corona. Parecía obvio que ahora la victoria estaba cerca. Alyssa estaba decidida a aprovechar la oportunidad. De adolescente, había visto en directo la final de Miss Universo 2006, en la que ganó la puertorriqueña Zuleyka Rivera. Visualizó los vídeos de esa gala una y otra vez para inspirarse.

Al ser una de las favoritas, la presión de la prensa y del público empezó a ser una exageración. Según ella, la tensión era tan grande que perdió el apetito. Y su apretada agenda como Miss Estados Unidos hacía que pasara días enteros sin comer nada, desde el desayuno hasta medianoche.

La evolución en imágenes demuestra que cada vez estaba más apagada y desganada.

 

 

 

 

 

La organización de Miss Estados Unidos se dio cuenta de que tenían un grave problema cuando le hicieron las pruebas de los vestidos que iba a llevar en Miss Universo. Alyssa tenía los brazos delgados que a partir de ese momento, le dieron instrucciones claras para que dejara de hacer deporte de inmediato. También le dieron permiso para que comer todo lo que quisiera, incluso comida basura.

La preparación de una Miss USA no es como la de una venezolana o puertorriqueña, que dura meses y tiene a un gran equipo detrás. Ya era demasiado tarde.

 

 

 

Cuando llegó a Brasil, Alyssa notaba que las otras misses la miraban de reojo y se burlaban de su cuerpo. Cuando la organización Miss Universo hizo fotos de todas las candidatas en bikini y las colgó en su web, las críticas hacia ella se dispararon. Twitter se llenó de comentarios tildándola de anoréxica, enferma u obsesionada con la delgadez.

Cada foto que salía publicada era peor que la anterior. Fue un shock.

 

 

 

Miss Estados cometió el error de negar de manera vehemente tener un transtorno alimenticio a través de las redes sociales. Nadie la creyó y empezó a parecer desesperada por las críticas, algo que las reinas de belleza tienen que ignorar.

Durante las tres semanas que pasó en Brasil, Alyssa Campanella comió grandes cantidades de arroz blanco, buscando que le provocara estreñimiento para así ganar un par de quilos a última hora. No dio resultado. Cada noche pedía un helado de chocolate y caramelo al servicio de habitaciones.

Parecía que no había nada que hacer. Su estómago, poco acostumbrado a digerir porquerías, empezó a protestar. Cuando fue ingresada por una gastroenteritis aguda, los médicos brasileños le dijeron que sus órganos estaban empezando a coger nutrientes de su corazón, lo que podría provocarle un paro cardiaco.

 

 

Sabiendo que ya no tenía ninguna posibilidad de ganar Miss Universo, Alyssa empezó a contar los días que faltaban para regresar a casa. Ya no era capaz de sonreír para las fotos y no quería levantarse por las mañanas. Las jornadas eran largas para las chicas, con desfiles, eventos, cenas y entregas de premios a todas horas. La pobre parecía un fantasma, deprimido y apagado.

Lo peor llegó cuando en la entrevista privada con los jueces, uno de ellos le preguntó cómo esperaba ser un modelo a seguir para chicas jóvenes con un cuerpo como el suyo. Alyssa respondió que solo quería ser un modelo para otras mujeres por su personalidad, no por su físico. Todas las chicas podían ser un ejemplo para otras, ya fueran obesas o muy delgadas. Dicen que esa respuesta le dio el paso a formar parte del primer grupo de semi-finalistas.

 

 

En la final se notaba que estaba muerta de vergüenza y con cero seguridad, aunque también parecía desafiante. Había pasado el primer corte, algo que nadie esperaba.

Ella misma había escogido un traje de gala voluminoso que tapara bien su cuerpo, pero sabía que no se libraba del desfile en traje de baño, que además era el primero. Antes de salir al escenario se metió en Twitter y vio un montaje que habían hecho con una foto de su cara y un esqueleto.

Aunque le aconsejaron taparse las caderas con el pareo que siempre dan a las misses para que jueguen con él en el desfile, Alyssa decidió quitárselo. Estaba harta de esconderse, de cubrirse el vientre con las manos. Cansada de sentirse mal por algo que no era culpa suya. Después de la competencia en bikini fue eliminada, pero la espectacular venezolana Vanessa Gonçalves, uno de los mejores cuerpos de la competencia, también.

 

 

 

Por desgracia, a Alyssa Campanella todavía le quedaban seis meses como Miss Estados Unidos. Por contrato, tenía que compartir piso en Nueva York y asistir a eventos con la nueva Miss Universo, Leila Lopes.

Su familia le dijo que renunciara al título, aunque tuviera que pagar una indemnización, pero Alyssa decidió seguir hasta el final. No quería darle el gusto a las personas que le habían estado haciendo bullying durante meses. Lo que sí hizo fue ir a un psicólogo y empezar a tratarse contra la depresión.

 

 

Cuando por fin pudo librarse de los concursos de belleza y regresar a casa, Alyssa Campanella se hizo varias pruebas médicas. Al fin descubrió la razón de aquella pérdida de peso, aunque nunca confesó cuál era. Solo ha dicho que era un problema subyacente y que se agravaba con el estrés y la ansiedad. Ya sabía lo que tenía que hacer para engordar sanamente y no a base de helados de chocolate.

Alyssa Campanella ha reconocido no haberse recuperado nunca del todo de aquel acoso que sufrió en internet. Dice que cada vez que ve la gala de Miss Universo siente un gran dolor por la ocasión que perdió. Supongo que también fue un duro golpe ver que su sucesora, Olivia Culpo, ganaba la corona de Miss Universo un año más tarde. Por otra parte, ahora dice sentirse más fuerte, madura y decidida. ¿Y físicamente? Bueno, las fotos de sus últimas apariciones hablan por sí solas. Wow.

 

 

Cuidado con llamar a una mujer obesa, pero con las que están muy delgadas, el semáforo de las impertinencias está siempre verde.

10 Comments
  1. Madre mía es guapísima!! Me recuerda mucho a la Sirenita.
    A la pobre la pasa como a mí con el cuerpo. El​ estrés de mi ingeniería ha «absorbido» literalmente mi cuerpo. De cintura para arriba se me marcan mucho los huesos, tanto que he recibido muchas críticas de otras chicas, de hecho me da vergüenza enseñar mi espalda y mis codos. El problema es que no engordo nada, sobretodo en esas zonas, y lo paso mal porque él no tener grasa por arriba me hace sentir mucho más que los demás el frío. Si engordo es sólo en el abdomen y cartuchera, y eso esforzándome muchísimo con guarrerías como intentaba esta chica. De hecho me he planteado hasta hacerme un «lipofilling» en codos y caderas, pero no sé si es posible en estas zonas, ya que donde suelen hacerlo es en cara y en raras ocasiones en los pechos.
    Ya me encantaría tener un cuerpo más voluminoso. De hecho, el de Robin Lawley es uno de mis favoritos.

    1. ¿Críticas de otras chicas? Yo, educadamente, las mandaría a la m…a. Es flipante lo hipócrita que es la sociedad con la delgadez, por una parte todo el mundo quiere estar delgado, y por otra tenemos la palabra «anoréxica» en la punta de la lengua siempre que vemos a una mujer delgada.

    2. Ostras! me pasa parecido :O y el caso que siempre estoy congelada , aun con 5 capas de ropa y bufanda… nunca habia pensado que fuese por eso, por tener hombros y brazon con muy poca grasa… yo solo engondo de tripa… y mis bracitos siempre son los mas canijos de todos jaja, si me pongo tirantes finos parece que me falta peso! Pero bueno.. tengo amigas con el problema contrario.. cogen kilos en brazos y hombros.. y se pasan la vida intentando disimularlo jaja No te preocupes y que cada persona se fije en su cuerpo, tu luce el tuyo como mas te guste a ti!

  2. Es increíble lo crueles que podemos llegar a ser con los demás. Si alguien está gordo le critican, si está muy delgado también, como si tuviera que parecerle bien o mal a los demás lo que pesamos!
    Yo, en mis tiempos de la universidad, estaba muy delgada porque a veces ni me acordaba de comer de tan centrada que estaba en otras cosas. Además, a veces, como que notaba que me entraban nervios y tenía la sensación de que lo que estaba comiendo no me estaba alimentando.
    También es verdad que pasaba por temporadas cortas con perdida de apetito, pero a pesar de eso, estaba sana! ni me sentía cansada, ni débil, ni nada de nada.
    En todo caso no era una delgadez extrema ni mucho menos, de verdad! Por eso me tocaba mucho las narices que algunas personas me vinieran con determinados comentarios del tipo » es que estás demasiado delgada, tienes que comer más» o insinuar que tenía algún problema de bulimia o anorexia. A mi madre se lo llegaron a preguntar.
    Para empezar no todos tenemos la misma constitución, ni el mismo metabolismo para entrar en comparaciones, muchas veces imposibles, y la gente no muestra respeto desde el momento que entra a juzgar a los demás.
    Ahora, desde hace casi diez años, tengo hipotiroidismo y lógicamente he ganado mucho peso porque tengo facilidad para coger kilos y mucha dificultad para perderlos. Aún así, no soy una persona que se pueda calificar de gorda porque mi constitución es atlética. He echado culo y piernas sobre todo y ahora lo que me toca oír de vez en cuando, de gente muy cercana eso sí, es «jo, vaya culo has echado» y de gente no tan cercana » porque tú estás fuerte, eh? no creo que contigo se meta cualquiera…»
    En fin, que la gente no tiene suficiente con vivir su vida y pensar en su propio peso. Además les sobra tiempo (que al final ese es el quid de la cuestión) para pensar si les parece bien o mal lo que pesas tú.

    1. Pues chica, mejor tener un cuerpo lleno de energía y fuerte que ser una escuchimizada sin vida! Y mejor tener un buen culo que un culo carpeta! La auténtica belleza se encuentra en ese peso donde nos sintamos más sanas, más alegres. De hecho a lo largo de la historia coinciden los cánones de belleza con aquel aspecto de la salud que escaseaba. Antes con las guerras y las hambrunas los cánones eran mujeres rellenitas, ahora con las epidemias de obesidad el cánon es lo delgado, y poco a poco, debido a que se está tomando conciencia con los trastornos alimentarios y la vida sedentaria, el cánon empieza a ser el cuerpo atlético y con un peso ya más acorde con un imc normal.
      Hace años cuando era una adolescente podía percibir como precioso el cuerpo delgado típico de las pasarelas, con piernas finísimas (quizás influenciada por los medios?) Ahora con el tiempo mi percepción va cambiando y veo mucho más hermoso un cuerpo con más masa, que se vea sano. Y tener fuerza es bueno, no implica tener que ser una de alterofilia, pero nuestro cuerpo al fin y al cabo tiene músculos para usarlos, no para tenerlos de perchero.
      Quizás sea que desde mi perspectiva de delgada en exceso empiezo a valorar aquello que me falta. Y te lo dice una que también está tratada de hipotiroidismo 🙂
      Tengo que tomar levotiroxina de por vida, al igual que tú me imagino.

  3. Tenemos por costumbre quejarnos de lo dificil que es adelgazar y mantener un tipín envidiable, pero sin duda, lo más dificil es engordar para muchas personas que tienen ciertos problemas de tiroides y asimilación de nutrientes.
    Es una auténtica belleza, ojala consiga todo lo que se proponga y cierre la boca a muchas personas con la lengua suelta.

  4. Hay mujeres que se «consumen», literalmente, el sistema nervioso es misterioso y juega malas pasadas. Lamentablemente como mujeres hemos permitido que se nos juzgue con la peor de las durezas por nuestro aspecto, me alegro que las nuevas generaciones estén mucho más alertas del bulling y de cómo hacernos sentir valiosas con toda la diversidad de cuerpos existentes.
    Abrazos Daiquiri!
    PD: No viene al cuento pero quería comentarte sobre el champú de Lush «Blousey», es alucinante Daiquiri!, es una pasta que no da espuma, seguramente lo conoces, mira que adoro el de menta-aguacate de P.B, y el de Márula y Awapuhi de P.M, pero es que mi larga melena de cabello fino sin forma quedó con brillo espejo, sin siliconas, suelto , cabello de joven!, alucino.

  5. Muchas gracias Isabel! Sí, yo también estoy enganchada de por vida a una pastilla pero no nos vamos a quejar que hay cosas peores 😉

  6. A mí me pasa lo mismo. Tengo tendencia a adelgazar y la gente en seguida saca conclusiones erróneas.
    Hermosa mujer! Estuve mirando su Instagram y lamentablemente ya no tiene ese color de cabello que le queda tan bonito. Ahora lo tiene de un color como un castaño claro con un degradado, obviamnete siendo muy bonita pero esa cabello rojo realmente la hacía destacar a mi criterio.
    Me encanta tu blog daiquiri!

  7. La miss USA más espectacular que he visto. Tenía todo para ganar, sino hubiera sido por esa baja de peso, hubiera quedado por lo menos en las últimas tres de seguro.

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